El Espanyol cerró en la noche del jueves al viernes la primera incorporación para la temporada 2010/2011. Se trata de Jesús Dátolo, centrocampista argentino, zurdo, que suele jugar por la banda. El futbolista llega a Barcelona cedido por el Nápoles para toda la próxima campaña y ayer mismo ya aterrizó en Barcelona, visitó el estadio de Cornellà-El Prat y conoció al cuerpo técnico del primer equipo.Dátolo, de 26 años, llega al Espanyol después de un primer año infructuoso en Europa. El Nápoles lo fichó el pasado verano, pero lo cedió en el mercado de invierno al Olympiakos griego, donde tuvo mejor suerte y esto ha hecho que el Espanyol se fije en él. El jugador llega en calidad de cedido, el Espanyol sólo deberá pagar su ficha y se reserva una opción de compra de 6 millones de euros que se podrá ejecutar de forma unilateral. Dátolo, primera incorporación de la temporada, viene para reforzar la banda izquierda del ataque blanquiazul, una de las zonas prioritarias a reforzar para el técnico Mauricio Pochettino.
El futbolista explicó ayer que tenía muchas ganas de recalar en un equipo como el Espanyol y esto quedó demostrado con su presencia ayer mismo en Barcelona, sólo unas horas después de que se cerrara el acuerdo entre Nápoles y Espanyol. A falta de firmar algunos documentos y de la pertinente revisión médica, el futbolista quiso pisar ya el estadio de Cornellà-El Prat y conocer al cuerpo técnico de su nuevo equipo.
Dátolo aterrizó ayer por la mañana en el aeropuerto del Prat y lo primero que hizo fue ir a visitar el estadio del Espanyol. Allí se presentó a Mauricio Pochettino, Joan Carrillo (ayer se desveló que será el segundo entrenador para la próxima temporada), Ramon Planes e Iván de la Peña (el capitán acudió a la presentación de las camisetas conmemorativas de los 110 años del club).
Durante su visita al estadio de Cornellà-El Prat, Dátolo tuvo tiempo de dirigir sus primeras palabras como jugador del Espanyol (aunque aún fuera de forma oficiosa). El jugador quiso dirigirse a los medios de comunicación para dejar clara su ilusión por estar aquí, porque “era lo que esperaba. Ojalá salga todo bien para ver si luego me pongo al tanto con el equipo, los jugadores, etc...”. Su ambición, dejó claro, es mejorar la imagen que dejó en su primer año en Europa. “Vengo a reivindicarme, es una revancha para mí después de un primer año complicado en Europa. El Espanyol es un club importante y por eso decidí venir. Ojalá pueda ser mi año y le dé al club lo mejor”, aseguró.
Dátolo mostró desde el primer momento una buena predisposición para llegar al Espanyol, porque sabía que es un “club con gente joven, jugadores jóvenes, y un técnico, Pochettino que es un entrenador importantísimo no sólo en España sino en todo el mundo”. El futbolista sabe que no será fácil, puesto que el reto es importante, pero confía plenamente en sus posibilidades para “echar una mano al equipo. Estoy ansioso por ponerme a trabajar de inmediato, que es lo que más quiero”.
Tras definirse como un jugador de banda, y afirmar que “jugaré donde decida el técnico”, el zurdo aseguró que le gusta la idea de jugar en España porque el fútbol que aquí se practica va más con sus características como jugador: “Aquí se practica el juego bonito, pero también sé que hay que trabajar duro, porque es un campeonato muy competido”, explicó.
El primer refuerzo del Espanyol ha tardado en llegar, pero al final se ha conseguido una buena operación con un jugador que tiene mucha proyección. Ahora habrá que estar atento a los movimientos en los despachos para ver si llega otro jugador polivalente para reforzar el ataque o si el equipo se quedará así.
El futbolista explicó ayer que tenía muchas ganas de recalar en un equipo como el Espanyol y esto quedó demostrado con su presencia ayer mismo en Barcelona, sólo unas horas después de que se cerrara el acuerdo entre Nápoles y Espanyol. A falta de firmar algunos documentos y de la pertinente revisión médica, el futbolista quiso pisar ya el estadio de Cornellà-El Prat y conocer al cuerpo técnico de su nuevo equipo.
Dátolo aterrizó ayer por la mañana en el aeropuerto del Prat y lo primero que hizo fue ir a visitar el estadio del Espanyol. Allí se presentó a Mauricio Pochettino, Joan Carrillo (ayer se desveló que será el segundo entrenador para la próxima temporada), Ramon Planes e Iván de la Peña (el capitán acudió a la presentación de las camisetas conmemorativas de los 110 años del club).
Durante su visita al estadio de Cornellà-El Prat, Dátolo tuvo tiempo de dirigir sus primeras palabras como jugador del Espanyol (aunque aún fuera de forma oficiosa). El jugador quiso dirigirse a los medios de comunicación para dejar clara su ilusión por estar aquí, porque “era lo que esperaba. Ojalá salga todo bien para ver si luego me pongo al tanto con el equipo, los jugadores, etc...”. Su ambición, dejó claro, es mejorar la imagen que dejó en su primer año en Europa. “Vengo a reivindicarme, es una revancha para mí después de un primer año complicado en Europa. El Espanyol es un club importante y por eso decidí venir. Ojalá pueda ser mi año y le dé al club lo mejor”, aseguró.
Dátolo mostró desde el primer momento una buena predisposición para llegar al Espanyol, porque sabía que es un “club con gente joven, jugadores jóvenes, y un técnico, Pochettino que es un entrenador importantísimo no sólo en España sino en todo el mundo”. El futbolista sabe que no será fácil, puesto que el reto es importante, pero confía plenamente en sus posibilidades para “echar una mano al equipo. Estoy ansioso por ponerme a trabajar de inmediato, que es lo que más quiero”.
Tras definirse como un jugador de banda, y afirmar que “jugaré donde decida el técnico”, el zurdo aseguró que le gusta la idea de jugar en España porque el fútbol que aquí se practica va más con sus características como jugador: “Aquí se practica el juego bonito, pero también sé que hay que trabajar duro, porque es un campeonato muy competido”, explicó.
El primer refuerzo del Espanyol ha tardado en llegar, pero al final se ha conseguido una buena operación con un jugador que tiene mucha proyección. Ahora habrá que estar atento a los movimientos en los despachos para ver si llega otro jugador polivalente para reforzar el ataque o si el equipo se quedará así.
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